Mañana está citada una reunión del directorio nacional conservador y todo está listo para que el representante cordobés David Barguil sea elegido como nuevo presidente de ese partido. Si la elección se da, Marta Lucía Ramírez quedará un paso más cerca de lograr su objetivo de convertirse en la jefe única de los azules.

Como contó La Silla, la semana pasada ya estaba claro que Barguil podía quedarse con ese cargo, pues Ramírez había renunciado a su aspiración para apoyarlo. Solo faltaba que el hoy presidente, Ómar Yepes, renunciara a su deseo de mantenerse en el cargo. Y eso fue lo que ocurrió el fin de semana.

Además, el principal contendor de Barguil era el senador Roberto Gerlein, quien está recuperándose de una isquemia. Eso lo saca temporalmente de la carrera y deja al grupo santista sin candidato fuerte para oponerse al cordobés.

La única duda que queda es si finalmente hay votación mañana. La Silla supo que del lado santista esperan poder postergar la votación para ganar tiempo. Si no lo logran se estará despejando el camino para que Barguil convoque a una convención antes del final del año.

Esa convención sería fundamental para definir las relaciones entre el partido y el Gobierno y para definir el derrotero para las elecciones de 2015. EL objetivo de Marta Lucía Ramírez es salir de la convención como jefe única del partido, lo que eliminaría el directorio nacional y la dejaría con el poder de hacer alianzas y entregar avales para las elecciones locales de 2015 – y lo que también dejaría a los azules más cerca del uribismo y más lejos de Santos.